Total Pageviews

Friday, March 16, 2012

Nombre de flor



Margarita se llama y le fastidia que a su mamá no se le hubiese ocurrido otra cosa más original y que ella tuviese que cargar con ese nombre el resto de su vida. Claro… siempre cabe la posibilidad de que hubiesen terminado diciéndole Marga, que a fin de cuentas recordaba a “amarga”, menos mal que no se fueron por ahí, o que una prima, ya que Margarita es hija única, le hubiese montado un apodo. Sí… algo así como Ita, porque la prima apenas hablaba y el nombre se le hacía muy largo… ¡Eso hubiera sido infinitamente peor!
Además, insiste en su frustración… de todas las flores, ¿ésa? No, sé… ella ha debido, protesta Margarita, consultar un libro de flores; los hay y bien explicativos, con significados dignos, soberbios… ¡memorables!
Por ejemplo,
Azalea: alegría de amar… no está mal, pero le dirían para fastidiar, ¿Azotea?
Begonia: cordialidad… ¡Uyy no, ¡qué aburrido! Además, es nombre de vieja de principios de siglo.
¿Y Camelia? Ah, mira, hay camelias de colores: blanca es orgullo por rechazo, roja es amor ardiente (¿qué…? camelias rojas… ¡interesante!) Rosa, admiración y deseo de seducir… seducción, romanticismo… Hummmm, creo que le gustaría esta camelia rosa.
¿Qué tal Dalia?: reconocimiento… no, no, no… pienso que se quedaría con Margarita.
Fresia: gracia, no está mal, y tiene una amiga con ese nombre y es un amor…
Gardenia: sinceridad, buena cualidad… ¿pero qué si la niña resultara una mentirosa compulsiva de nacimiento?
Hortensia: que blanca significa capricho y verde: déjame esperar… ¡Se conformaría con Margarita!
Iris: ¡Ay!: qué bonito… ternura y las blancas: te amo con confianza… Y amarillas, te amo con alegría… Cómo empalagoso el nombre, ¿no? ¡Nada sexy!
Jazmín: ¡Epa, upa! Amor voluptuoso… ¡Quiero ser todo para ti! Esa última parte es como acosadora…
Lila: hay blancas: amor renaciente y malvas: amor fuerte… para ser justa, tendría que ser medio malva clarita para que no fuera tan intensa…
Loto: elocuencia… pero sólo se justificaría con que fuera japonesa, porque las analogías con la lotería, ¡acabarían volviéndola más loca todavía!
Narcisa: sólo te quieres a ti… Ya uno comienza la vida engreídamente, esta no sirve.
Orquídea: seducción, sensualidad… belleza suprema… ¡Demasiado sexy!
Iba a mencionar a Petunia, pero significa obstáculo, y oye, abrir los ojos a la vida con obstáculo por nombre, ¡es en sí, un obstáculo y valga la redundancia!
Rosa es tan común como Margarita… sí, es la favorita en el día de San Valentín, pero… me quedo con Margarita.
Tulipán: mi amor es sincero… está bien, pero el nombre es así como rebuscado, ¿no?
Verónica y Violeta son contradictorias, la primera: fidelidad, la segunda: amor oculto… los amores ocultos a veces son emocionantes y la fidelidad a toda costa, a veces aburrida…
       ¡Ah, pero fíjate, con el cuento me salté a Margarita!: estima y confianza. Blancas “Eres la más bella”, azules “Creo en ti” y rosas o violetas “Eres la que más he amado nunca”…
¡Pero bueno Margarita! No es nada corrientico el nombre y creo que tu mamá tuvo toda la razón en ponértelo. Así es que déjate de tonterías y acéptalo de una buena vez y cuando te empiecen a fastidiar con lo de siempre de “me quieres… no me quieres”, recuerda que eres la más bella, porque él cree en ti y eres la que más ha amado nunca. Tus amiguitas sólo están verdes de envidia, porque eres la que tiene loco al más deseado de la clase.

Así es que, ¡mándalas a deshojar a otra Margarita!

No comments:

Post a Comment